Camboya tiene un clima monzónico tropical con dos estaciones principales: la temporada de lluvias, de mayo a octubre, y la estación seca, de noviembre a abril. Las temperaturas se mantienen cálidas durante todo el año, generalmente entre 25 °C y 35 °C. Aunque las lluvias son más intensas en los meses húmedos, el país disfruta de paisajes verdes y exuberantes, mientras que la estación seca ofrece cielos despejados y viajes más cómodos. En general, el clima de Camboya es bastante uniforme, aunque se pueden notar pequeñas variaciones entre las regiones norte, central y sur.
Norte de Camboya
Clima y estaciones del norte de Camboya: La región norte, donde se encuentra Siem Reap y los famosos templos de Angkor, presenta un clima caluroso y húmedo durante todo el año. Las lluvias se concentran entre mayo y septiembre, lo que hace que la zona sea más verde pero, a veces, un poco fangosa para explorar los templos. La estación seca trae noches más frescas y días soleados.
Mejor época para viajar al norte de Camboya: La mejor época para visitar es de noviembre a febrero, cuando las temperaturas son más suaves y las excursiones al aire libre resultan más agradables. También es la temporada alta para visitar Angkor Wat bajo cielos despejados.
Centro de Camboya
Clima y estaciones del centro de Camboya: El centro de Camboya, que incluye Phnom Penh, tiene un clima tropical típico, con veranos calurosos y fuertes lluvias durante el monzón. La temporada de lluvias puede causar inundaciones en algunas zonas bajas, mientras que la estación seca se mantiene soleada y cálida, ideal para los recorridos culturales y la exploración de la ciudad.
Mejor época para viajar al centro de Camboya: La época más agradable para explorar es de diciembre a marzo, cuando la humedad es más baja y las temperaturas diurnas son más fáciles de soportar. Este período es especialmente adecuado para los recorridos a pie, los cruceros por el río y para disfrutar del ambiente animado de Phnom Penh.
Sur de Camboya
Clima y estaciones del sur de Camboya: La costa sur, que abarca Sihanoukville, Kep y Kampot, tiene un clima más húmedo influido por el mar. La temporada de lluvias trae aguaceros tropicales intensos pero breves, mientras que la estación seca ofrece un clima soleado perfecto para disfrutar de las playas y las escapadas a las islas.
Mejor época para viajar al sur de Camboya: Los mejores meses para visitar son de noviembre a abril, cuando las playas están en su mejor momento, con mares tranquilos, sol dorado y muy pocas lluvias. Es la temporada ideal para nadar, practicar esnórquel y relajarse junto a la costa.
Bali disfruta de un clima tropical con temperaturas cálidas que oscilan entre los 26 °C y los 32 °C durante todo el año. La isla tiene dos estaciones bien definidas, influenciadas por los vientos monzónicos: la estación seca, de abril a octubre, caracterizada por días soleados y menor humedad; y la estación lluviosa, de noviembre a marzo, que trae lluvias más intensas y mayor humedad.
Descubre la magia de Bali en un viaje que combina naturaleza, cultura y relajación. Explora templos antiguos rodeados de arrozales, contempla atardeceres inolvidables en playas de arena dorada y vive la calidez de la hospitalidad balinesa. Desde Ubud hasta las aguas turquesas del sur, este recorrido revela el alma espiritual y exótica de la “Isla de los Dioses”.
Descubre Pekín, una ciudad donde la historia milenaria se une con la modernidad vibrante. Pasear por la majestuosa Ciudad Prohibida, saborear el auténtico pato laqueado, perderse entre los hutongs tradicionales o contemplar el atardecer desde la Gran Muralla son experiencias que hacen de esta capital una parada imprescindible para todo viajero.
La mejor época para visitar China depende de las experiencias que se deseen vivir. En general, los meses de primavera (abril a junio) y otoño (septiembre a noviembre) son ideales, ya que el clima es más estable, las temperaturas son agradables y los paisajes lucen en todo su esplendor.
Viajar a China es adentrarse en un mundo donde la historia milenaria se mezcla con el pulso vibrante de la modernidad. Desde templos antiguos y palacios imperiales hasta deslumbrantes rascacielos y avenidas iluminadas, cada rincón del país ofrece una experiencia única para los sentidos.
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