Puerta de entrada al sur de Laos, desde donde se accede a la meseta de Bolaven, Wat Phou y las 4.000 islas. La ciudad también es un centro de la cultura del café y de los mercados locales.
Explorar la Meseta de Bolaven
Realiza una excursión a las tierras altas, famosas por su clima fresco, sus exuberantes plantaciones de café y sus impresionantes cascadas, como Tad Fane y Tad Yuang.

Visitar Wat Luang
Descubre el templo más importante de Pakse, ubicado de manera hermosa a orillas del río Xe Don, ideal para aprender sobre el budismo local.

Recorrer los mercados locales
Vive la vida diaria de los habitantes visitando el mercado Dao Heuang, donde encontrarás productos frescos, textiles y snacks tradicionales laosianos.

Realizar un Paseo en Barco por los Ríos Mekong o Xe Don
Disfruta de un relajante paseo en barco con vistas panorámicas de las riberas, especialmente durante el atardecer.

Usar Pakse como Puerta de Entrada a Champasak y las 4.000 Islas

Desde Pakse, es fácil llegar a Wat Phou (Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO) y a Si Phan Don, donde se pueden admirar cascadas y los raros delfines de Irrawaddy.
Bali disfruta de un clima tropical con temperaturas cálidas que oscilan entre los 26 °C y los 32 °C durante todo el año. La isla tiene dos estaciones bien definidas, influenciadas por los vientos monzónicos: la estación seca, de abril a octubre, caracterizada por días soleados y menor humedad; y la estación lluviosa, de noviembre a marzo, que trae lluvias más intensas y mayor humedad.
Descubre la magia de Bali en un viaje que combina naturaleza, cultura y relajación. Explora templos antiguos rodeados de arrozales, contempla atardeceres inolvidables en playas de arena dorada y vive la calidez de la hospitalidad balinesa. Desde Ubud hasta las aguas turquesas del sur, este recorrido revela el alma espiritual y exótica de la “Isla de los Dioses”.
Descubre Pekín, una ciudad donde la historia milenaria se une con la modernidad vibrante. Pasear por la majestuosa Ciudad Prohibida, saborear el auténtico pato laqueado, perderse entre los hutongs tradicionales o contemplar el atardecer desde la Gran Muralla son experiencias que hacen de esta capital una parada imprescindible para todo viajero.
La mejor época para visitar China depende de las experiencias que se deseen vivir. En general, los meses de primavera (abril a junio) y otoño (septiembre a noviembre) son ideales, ya que el clima es más estable, las temperaturas son agradables y los paisajes lucen en todo su esplendor.
Viajar a China es adentrarse en un mundo donde la historia milenaria se mezcla con el pulso vibrante de la modernidad. Desde templos antiguos y palacios imperiales hasta deslumbrantes rascacielos y avenidas iluminadas, cada rincón del país ofrece una experiencia única para los sentidos.
Tailandia ofrece entrada sin visa para estancias cortas, con opciones de extensión o solicitud de visas a largo plazo según el propósito. El país cuenta con excelente atención médica, transporte confiable y comodidades modernas como cajeros automáticos, internet y centros comerciales. Con su vibrante comida callejera, mercados nocturnos y fácil conectividad entre ciudades e islas, Tailandia es un destino seguro y accesible para los viajeros.