Shanghái, la metrópoli más cosmopolita de China, deslumbra con su impresionante horizonte, su ambiente vanguardista y el encanto nostálgico del Bund, donde Oriente y Occidente se encuentran en perfecta armonía.
1. Pasear por el Bund (Waitan)
El paseo más emblemático de Shanghái. Desde aquí se admira el contraste entre los edificios coloniales y los modernos rascacielos de Pudong.

2. Subir a la Torre de Shanghái o a la Torre Jin Mao
Desde las alturas, se obtiene una vista impresionante de toda la ciudad, una experiencia imprescindible para apreciar la magnitud del desarrollo urbano chino.

3. Explorar los Jardines Yuyuan
Un remanso de paz en el corazón de la ciudad antigua, con pabellones, estanques y puentes que reflejan la elegancia clásica china.

4. Visitar el Barrio de Tianzifang
Un laberinto de callejuelas con tiendas de arte, cafés y boutiques donde se mezcla la creatividad moderna con la esencia tradicional.

5. Disfrutar un crucero por el Río Huangpu
Ideal para contemplar las luces nocturnas de Shanghái. Desde el agua, el contraste entre el pasado y el futuro se vuelve aún más espectacular.

Bali disfruta de un clima tropical con temperaturas cálidas que oscilan entre los 26 °C y los 32 °C durante todo el año. La isla tiene dos estaciones bien definidas, influenciadas por los vientos monzónicos: la estación seca, de abril a octubre, caracterizada por días soleados y menor humedad; y la estación lluviosa, de noviembre a marzo, que trae lluvias más intensas y mayor humedad.
Descubre la magia de Bali en un viaje que combina naturaleza, cultura y relajación. Explora templos antiguos rodeados de arrozales, contempla atardeceres inolvidables en playas de arena dorada y vive la calidez de la hospitalidad balinesa. Desde Ubud hasta las aguas turquesas del sur, este recorrido revela el alma espiritual y exótica de la “Isla de los Dioses”.
Descubre Pekín, una ciudad donde la historia milenaria se une con la modernidad vibrante. Pasear por la majestuosa Ciudad Prohibida, saborear el auténtico pato laqueado, perderse entre los hutongs tradicionales o contemplar el atardecer desde la Gran Muralla son experiencias que hacen de esta capital una parada imprescindible para todo viajero.
La mejor época para visitar China depende de las experiencias que se deseen vivir. En general, los meses de primavera (abril a junio) y otoño (septiembre a noviembre) son ideales, ya que el clima es más estable, las temperaturas son agradables y los paisajes lucen en todo su esplendor.
Viajar a China es adentrarse en un mundo donde la historia milenaria se mezcla con el pulso vibrante de la modernidad. Desde templos antiguos y palacios imperiales hasta deslumbrantes rascacielos y avenidas iluminadas, cada rincón del país ofrece una experiencia única para los sentidos.
Tailandia ofrece entrada sin visa para estancias cortas, con opciones de extensión o solicitud de visas a largo plazo según el propósito. El país cuenta con excelente atención médica, transporte confiable y comodidades modernas como cajeros automáticos, internet y centros comerciales. Con su vibrante comida callejera, mercados nocturnos y fácil conectividad entre ciudades e islas, Tailandia es un destino seguro y accesible para los viajeros.